Manhattan desde el Brooklin. New York, Agosto de 2010.
- Cámara: Sony DSLR-A100
- Exposición: 0.3 sec
- Aperture: f/4.0
- Lente: 18 mm
- ISO: 200
Manhattan desde el Brooklin. New York, Agosto de 2010.
Mejor verla con las luces apagadas
Empire State & Downtown desde el Top of the Rock. New York, Agosto de 2010.
El viaje a Montréal, como todo lo que llevabamos recorrido de Canadá fue genial, la carretera estaba estupenda, los paisajes eran increíbles y el tiempo acompañaba. La ruta que seguimos fue la autopista ON 417 East nuevamente alrededor de 200 km. de viaje, así que lo hicimos bastante rápido, parando a comer y todo.
Al llegar a Montréal, nos encontramos con que el tráfico era bastante más caótico que las otras ciudades que habiamos visitado, quizá porque ya no era fin de semana, y la gente tedría que ir a trabajar y tal, aún así el maldito GPS nos jugó una mala pasada y nos metió por una avenida de 4 carriles en contra dirección, al ver la marabunta de coches que se nos venian encima de frente, nos hicimos caquita de la buena. Suerte que encontramos una escapatoria en forma de estación de autobuses y nos salvamos. A partir de entonces las conversaciones en el coche eran en plan:
– Copiloto: Gira la próxima a la izquierda.
– Piloto: Seguro? Se puede??
– Copiloto: Sí, bastante seguro.
– Piloto: Ahhh no me fio! No giro!
– Copiloto: Que gires leeeeñe!
– Piloto: Jodeeer vale, pero si nos la pegamos, culpa tuya.
Este post está dedicado Isaac ya que me recordó que estaba escribiendo esta crónica y me animó a seguir con ella. Un saludo Bro!
Continuando con el relato del viaje a Canadá y USA que hicimos en 2009, recuerdo que en la parte anterior lo dejamos en que nos dirigíamos a Ottawa, por las majestuosas autopistas canadienses. Bien entrada la tarde depués del largo viaje desde Toronto llegamos a la capital de Canadá y empezamos a buscar algun sitio donde pasar la noche.
Fuimos preguntando en algunos moteles y hostales en plan Best Western o Quality Inn pero todo nos parecia bastante caro (unos 120 Dolares canadienses – 90 Euros por una habitación), por lo que decidimos preguntar en la oficina de turismo. Allí nos mandaron hacia el HI Ottawa Jail Hostel, un hostal para jóvenes que esta en una vieja cárcel, tenía buena pinta, pero al no tener nada reservado solo tenian habitaciones de las caras, y también nos pedían unos 40 Euros por cada una. Empezaba a hacerse tarde y no teníamos dónde dormir, la cosa empezaba a pintar negra. Pero la recepcionista del Ottawa Jail Hostel nos dio la dirección de otro hostal, aunque no sabía como estarían de habitaciones.
Los viajeros llegamos a Ottawa. Foto de dani.dmd86
Por dónde lo habia dejado… ah! si, estábamos huyendo del diluvio universal en Niagara Falls y pusimos rumbo a Toronto. El trayecto, en principio corto ( 80 millas, unos 130 km) se hizo pesado al principio por culpa de la inoportuna lluvia. Apenas si se veía la carretera, pero tan repetinamente como vino, la lluvia se fue, y los 3/4 restantes de viaje lo hicimos decentemente, aunque un poco decepcionados por lo que nos pasó en Niagara Falls.
Llegando a Toronto
Llegamos a Toronto a media mañana del segundo día de viaje y ya desde lejos pudimos ver lo imponente que era, llena de modernos rascacielos y la CN Tower dominando. Una vez allí, nos econtramos una ciudad súper límpia, todo parecía moderno y perfecto y daba la impresión de ser una ciudad hecha para empresarios ricos de traje y corbata. Y es que Toronto no es moco de pavo, sino que es la capital de la región de Ontario y con sus 2 millones y medio de habitantes, la ciudad más grande de Canadá, además de ser su centro financiero. Ojo!
Toronto CN Tower by jose.jhg, on Flickr
Con el coche bien aparcadito para evitar multas y conscientes de que iba a ser una visita relámpago decidimos ir por faena y hacer el papel de turista a la perfección, así que visitamos los lugares más importantes de la ciudad casi a correcuita:
Toronto City Hall by jose.jhg, on Flickr
La verdad es que nos quedamos con las ganas de visitar otros sitios, y que recomiendo en caso de que visiteis Toronto con más tiempo ya que posiblemente valgan la pena como:
Toronto Central Station by jose.jhg, on Flickr
A primera hora de la tarde ya habíamos visto prácticamente todo lo que nos habíamos planteado y decidimos ponernos en marcha hacia Ottawa, la capital del país. Esta tercera etapa del viaje era un pelín más larga: unos 448 km. La ruta que seguimos fue básicamente por la autopista ON-401 East (en este tramo nos desviamos un poco como contaré después) y después tomamos la ON-416 North a la altura de Johnstown ya dirección Ottawa.
Como el camino era bastante largo, decidimos hacer una paradita cerca de la ciudad de Kingston casi a medio camino (a unos 200 km de Ottawa) a la orilla de algun río o del Lago Ontario y disfrutar un poco del countryside canadiense. Y dicho y hecho, nos salimos de la autopista y depués de tomar algunas carreteras secundarias, paramos en un super, el Price Chopper de Trenton y en un pícnic a orillas del lago Ontario, disfrutamos de nuestros Pepperettes en las puertas del Trent–Severn Waterway. Toda una experiencia. Con Steven Seagulls incluídas.
Punto donde el lago Ontario se convierte en un canal. De 2009-08-03 (Ottawa)
Esto quizá demoró un poco el trayecto a Ottawa, pero de verdad recomiendo parar en cualquier lugar un poco alejado de las grandes ciudades y disfrutar de las gentes canadienses y la belleza del entorno. La segunda mitad del viaje a Ottawa fue espectacular, el atardacer en las llanuras repletas de verdes campos, a pesar del cansacio, yo hubiera preferido que no se hubiese acabado. Pero se acabó, justo al llegar a Ottawa, pero eso lo explicaré en la siguiente parte.
Fotos del Roadtrip Canadá & USA 2009 las podeis ver en el set de flickr
Leer la primera parte del Roadtrip Canadá & USA 2009
Igual con un poco de retraso, pero como dice el refranero: Nunca es tarde si la dicha es buena. Así que voy a pasar a explicar un poco lo que fué la primera etapa de nuestro viaje a Norte América el pasado 2009. Esta primera estapa consistía en un roadtrip por la zona este de Canadá.
El punto de partida fue la ciudad de New York, dónde llegaba nuestro avión, ya que el grueso de las “vacaciones” las íbamos a pasar en esta ciudad, haciendo un curso de inglés. Pues bien, aterrizamos en el aeropuerto JFK sin ningún contratiempo, excepto alguna sesión de cuartillo oscuro con preguntas indiscretas al coleguita. Después de eso, nos dirigimos a nuestro hostal, donde descansaríamos antes de empezar el roadtrip. Pero antes de eso, no pudimos evitar ir a comernos nuestra primera burguer typical american a un Wendy’s, nada mas y nada menos que una Baconator, un monstruo de más de 1000 kcal.
Baconator de Wendy’s por dani.dmd86
El hostal elegido fue el AAE Super Eight Hostel, ya que estaba muy cerca del aeropuerto y al dia siguiente teníamos que volver a recoger el coche de alquiler. El hostal, pues normal, sencillo y no muy caro, average en general, pero tampoco pedíamos mas.
Al día siguiente, tempranito por la mañana, desayunamos a top y nos fuimos a buscar el coche. Lo alquilamos en la compañía National, el más barato que encontramos y que como veréis más adelante, nos dio algunos problemas. Nos tocó un Toyota Yaris, automático, cómo no. No esperábamos más aunque nos pareció poca cosa, pero al tener aire acondicionado pues nos conformanos y además, más adelante le pillaríamos verdadero cariño.
Sin perder tiempo nos pusimos en marcha, dirección a la frontera canadiense, en concreto a Niagara Falls. A pesar de estar a las afueras de New York, el tráfico era un caos y tardamos horas en alejarnos de la gran ciudad. Una vez conseguido, todo fue sobre ruedas, alguna retención por algún accidente, pero todo genial. La autopista era enorme y tal como esperas, había un MacDonald’s o un Denny’s o un Wendy’s cada pocos kilómetros (o deberia decir millas), allí encontrar un sitio para comer es de lo más fácil que hay.
On the road by jose.jhg, on Flickr
Seguimos la ruta por las Interestatales I-81 N y luego la I-90 W atravesando los estados de Pennsylvania y New York. Tan sólo no salimos por rutas menores para ir a reponer fuerzas a algun local de comida rápida (es lo único que hay) y para ir a un centro comercial a comprar provisiones. Y qué centro comercial, como dirian allí OMG! Era como en las pelis de zombis donde se encierran los supervivientes. Más que un centro comercial era una ciudad comercial, te podías perder horas y horas, y lo mejor de todo es que no parecía tener ninguna ciudad grande cerca, era en un punto perdido vete tu a saber dónde.
Niagara Falls in the night by jose.jhg, on Flickr
Total, que después de unas 420 millas (675km) y casi 8 horas de coche llegamos ya por la noche a la frontera canadiense. Allí tuvimos que hacer la típica cola del paso fonterizo y que un funcionario de aduanas nos revisase los pasaportes, con la salvedad que uno de nosotros lo intentó (involuntariamente) sobornar. Como si fuera un país subdesarrollado o algo…
– Emmm hello! Your passports please?
– Here.
– Tourism or business?
– Tourism, tourism ….
– Emmm there’s $100 in your passport…
– Oh! Sorry sorry!
– ¬¬
Después de esta anécdota, nos sellaron los pasaportes y nos dejaron pasar, y nos dirigimos a nuestro hostal, el único que teníamos reservado. En esta ocasión fue un poco más hippi, el HI Hostel Niagara Falls, a mi me gustó mucho, en plan mochilero mucha gente joven y tal y buenos precios. Una vez instalados decidimos ir a ver las Cataratas del Niágara por la noche, la verdad es que es espectacular, pero toda el agua que hay en suspensión no nos dejó hacer muchas fotos y las pocas que hicimos no salieron muy bien. Después de eso, intentamos salir un rato por ahí pero al ser tan tarde, pues no econtramos nada, por lo que nos fuimos a descansar.
Niagara Falls by jose.jhg, on Flickr
A la mañana siguiente, nos fuimos a ver las Cataratas del Niágara en todo su esplendor, pero el día se levanto bastante chungo y amenazaba lluvia. Y la amenaza se cumplió: un minuto contemplando la espectacularidad de las cataratas desde el lado canadiense y empezó a diluviar, y digo diluviar pero me quedo corto. Tuvimos que huir cames ajudeu-me para evitar morir ahogados (exagerao!) y refugiarnos en el coche. Aqui tuvimos que tomar una decisión, esperar a que parase de llover para disfrutar de Niagara Falls en todo su esplendor y retrasar el resto del plan o largarnos y seguir con él. Y decidimos encender motores y poner rumbo a Toronto.
Fotos del Roadtrip Canadá & USA 2009 las podeis ver en el set de flickr